En el contexto del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, se ha reafirmado la preocupante situación en Quintana Roo, donde persiste un entorno de alto riesgo para las mujeres. En lugar de enfrentar de frente esta realidad, se pide el cese de simulaciones y la implementación de políticas concretas y efectivas que aborden esta problemática.
Diversos colectivos, entre ellos el Instituto de Liderazgo y Empoderamiento Záazil Há, Marea Verde, Foráneas Unidas y la Red de Víctimas Quintanarroense, se han unido en acciones conmemorativas y de protesta ante estos preocupantes indicadores.
Los datos emitidos por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) son alarmantes: Quintana Roo lidera la estadística de delitos contra mujeres. En el ámbito de la trata de personas, la tasa en esta región es de 6.7 por cada 100 mil habitantes, mientras que a nivel nacional es de 10.7. En el caso de violaciones, la tasa asciende a 23.86 por cada 100 mil habitantes, superando significativamente la media nacional, que se mantiene en 10.7.
La persistente falta de medidas de seguridad pública efectivas ha dejado un legado de décadas en esta problemática, una situación inaceptable que demanda una atención prioritaria.
Ericka Cornelio Ramos, presidenta del Instituto de Liderazgo y Capacitación A. C. Záazil Há, encabezó una protesta en la Explanada de la Bandera, donde las participantes expresaron su indignación mediante pancartas que denunciaban la carencia de mecanismos de protección adecuados para las mujeres.
En José María Morelos, las colectivas Marea Verde y Foráneas Unidas, lideradas por Yunitzilim Rodríguez Pedraza y Verónica Kú, respectivamente, llevaron a cabo una marcha con el respaldo de numerosas mujeres, marcando la inauguración de lo que llamaron “la antimonumenta”.
En estas acciones, reiteraron su firme posición de no tolerar más abusos, ya sea de aquellos que perpetúan la violencia o de las autoridades que permiten su existencia.
Además, se realizó un Ritual Maya con el objetivo de atraer energías positivas en este nuevo capítulo de empoderamiento femenino.
Por su parte, la Red de Víctimas Quintanarroense organizó un conversatorio virtual con líderes diversos para concienciar sobre esta problemática.
Estas manifestaciones han buscado, principalmente, exigir acciones concretas y efectivas para prevenir y combatir la violencia contra la mujer, evidenciando que ni siquiera el cambio de administración estatal ha logrado erradicar este grave problema que persiste en la región.
