La jerarquía policial de Islandia ha ajustado a la baja la evaluación del peligro asociado al volcán que hizo erupción a comienzos de esta semana, según informó la Agencia de Protección Civil del país.
La erupción en el suroeste de Islandia, ocurrida el pasado lunes, fue precedida por semanas de actividad sísmica, lo que derivó en la evacuación completa de una localidad con una población de 4 mil habitantes.
La autoridad de Protección Civil manifestó que, ante la ausencia de actividad evidente en el volcán, se tomó la decisión de disminuir el nivel de alerta de “emergencia” a “peligro”.
No obstante, la oficina meteorológica de Islandia advirtió sobre el creciente riesgo de una nueva erupción en la zona circundante al sistema volcánico de Svartsengi, donde continúa el proceso de acumulación de magma.
En un comunicado emitido el viernes por la noche, esta entidad señaló la probabilidad de que este escenario desencadene una nueva intrusión de diques y, en última instancia, provoque una nueva erupción volcánica.
