El presidente Milei ha instado a una convocatoria de sesiones extraordinarias en el Congreso argentino con el propósito de acelerar la implementación de sus reformas. Entre las propuestas destacadas se encuentran la reintroducción de un impuesto a los sueldos y la simplificación del sistema electoral.
El decreto fue rubricado el viernes pasado en el último momento y ha sido remitido al Palacio Legislativo. Este busca que los legisladores nacionales discutan los proyectos de ley desde el 26 de diciembre hasta el 31 de enero.
Esta medida se suma a otro decreto emitido durante la semana que abarca más de 300 medidas destinadas a desregular la economía del país. Este conjunto de acciones incluye la derogación de leyes de control de precios y el estímulo a la actividad industrial.
Milei, un economista de tendencia libertaria que ha incursionado en la política argentina en los últimos años, promueve una plataforma orientada a reducir significativamente el tamaño del Estado. Su enfoque incluye la eliminación del déficit fiscal y la revitalización económica mediante una devaluación inicial de la moneda local, que se ha visto afectada en un 54.2%.
Argentina está inmersa en una recurrente crisis caracterizada por una alta inflación, niveles elevados de pobreza, reservas netas negativas y una moneda doméstica poco fiable.
A pesar de haber asumido la presidencia recientemente el 10 de diciembre, Milei ya ha enfrentado protestas callejeras debido a las decisiones adoptadas. Organizaciones sociales y sindicales se movilizaron en diferentes puntos del país en contra del paquete de reformas propuesto por el gobierno de Javier Milei.
La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), que representa a empleados estatales en toda Argentina, llevó a cabo asambleas y paros, marchando hasta la sede de la Jefatura de Gabinete en Buenos Aires, además de concentrarse en el Obelisco y el Ministerio de Capital Humano.
Rodolfo Aguiar, secretario general de ATE, hizo hincapié en la responsabilidad del sindicato en la defensa de los derechos de los trabajadores y jubilados. Expresó su preocupación por la ausencia de medidas que beneficien a estos sectores por parte del nuevo gobierno.
En la capital, los manifestantes rodearon los puntos de encuentro desde las aceras para evitar interrumpir el tráfico, siguiendo el protocolo ‘antipiquetes’ establecido por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
