En la ciudad costera de Acapulco, Guerrero, el presidente Andrés Manuel López Obrador proyectó un horizonte de renacimiento y confianza tras la devastación dejada por el huracán Otis, que desafortunadamente cobró la vida de 50 personas y provocó daños significativos.
Durante una sesión informativa en este puerto, el mandatario anunció la implementación de un plan de apoyo masivo que beneficiará a 322 mil 129 familias y pequeños negocios afectados. Estos subsidios, que oscilan entre los 35 mil y 60 mil pesos, se destinarán a la reconstrucción de hogares y locales comerciales dañados. López Obrador aseguró que no habrá restricciones financieras para asistir a los damnificados.
Los fondos se entregarán en dos tramos: el primero se distribuirá entre el 8 y el 21 de diciembre, mientras que el segundo será del 22 al 31 de diciembre. Para facilitar este proceso, se instalarán centros de atención del Bienestar en puntos estratégicos de Acapulco y Coyuca de Benítez, resguardados por elementos de la Guardia Nacional. Además, se proporcionará un suplemento de 8 mil pesos para labores de limpieza, con fechas de pago del 29 de noviembre al 7 de diciembre.
El presidente subrayó la protección proporcionada por la Guardia Nacional en los puntos de distribución y emitió una advertencia a los delincuentes para evitar cualquier interferencia.
Enfatizó la importancia de la colaboración comunitaria en la reconstrucción, con un énfasis especial en la rehabilitación de más de 250 mil viviendas afectadas. Propuso un modelo de autoconstrucción que involucre a las familias, recordando que la mayoría de las viviendas en México han sido erigidas por los propios miembros de las familias.
López Obrador garantizó que la entrega de apoyos será directa, eliminando cualquier posibilidad de corrupción y asegurando que cada beneficiario reciba lo que le corresponde.
En un mensaje contundente, afirmó que no habrá límites presupuestarios y que el gobierno cuenta con los recursos necesarios para la reconstrucción y mejora de Acapulco y sus alrededores.
Además, anunció la adquisición de 250 mil paquetes de enseres y electrodomésticos para los hogares afectados. Se han establecido acuerdos con empresarios nacionales y gobiernos extranjeros, mientras se realizan gestiones con China y Corea del Sur para completar los paquetes pendientes.
El presidente expresó su gratitud al sector privado por su colaboración en la reconstrucción y reactivación económica, enfatizando la importancia de la recuperación turística para Acapulco.
Subrayó que, una vez atendidas las necesidades primarias de la población, la reactivación económica es una prioridad absoluta. Se comprometió a resolver los problemas de suministro eléctrico para Navidad y a tener el alumbrado público, agua, escuelas rehabilitadas y la región limpia para fin de año.
Asimismo, se comprometió a continuar la búsqueda de personas desaparecidas y a rendir homenaje a los fallecidos durante una ceremonia por el Día de la Marina. Reafirmó el apoyo continuo a las familias afectadas.
