El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, afirmó con firmeza que el país se encuentra en un estado positivo en todos los aspectos, desmintiendo la noción de que la violencia represente una tragedia durante su mandato.
En la rueda de prensa matutina en Palacio Nacional, el mandatario exhortó a sus opositores a mantener la calma y reflexionar antes de criticar, destacando el momento significativo que, según él, vive México en su historia.
“Insto respetuosamente a nuestros adversarios a pensar antes de actuar. Aunque las emociones estén a flor de piel, es crucial mantener la cabeza fría. No somos enemigos irreconciliables, sino más bien adversarios con los que se puede debatir con argumentos, veracidad y honestidad. Debemos estar serenos, contentos, felices; el país está en una situación muy favorable”, expresó López Obrador.
El presidente enfatizó la reputación internacional de México y desestimó críticas sobre la violencia en el país. Respondió a las observaciones del periodista Jorge Ramos, quien señaló que México es considerado uno de los países más peligrosos en términos de violencia. López Obrador contradijo esta afirmación, sugiriendo que la tragedia reside en el entorno del periodista, no en México.
“Vivimos un momento destacado en la historia de México. Comparen la situación con la del mundo en general. Estamos muy bien y debemos celebrarlo. Aunque haya diferencias políticas, somos libres para expresarlas, pero no hay razón para dramatizar”, puntualizó.
El mandatario recordó que su Gobierno concluirá en ocho meses y que será el pueblo quien decida el rumbo del país en las próximas elecciones de junio. Desestimó las acusaciones de dictadura y aseguró que se retirará por completo, poniendo fin a lo que él denomina populismo y comunismo.
“El poder está en manos del pueblo, es el pueblo quien toma las decisiones. Cuando me retire, se extinguirá cualquier atisbo de populismo o comunismo. Sería absurdo que pretendiera perpetuarme en el poder, mi tiempo ya se agota”, afirmó en el Salón Tesorería este martes.
López Obrador reconoció el lunes que su Gobierno concluirá en octubre con la mayor cifra de asesinatos en la historia, atribuyéndolo a la tendencia dejada por administraciones anteriores. Frente a las preguntas de Jorge Ramos, el presidente admitió que su sexenio podría terminar con un récord de más de 190 mil asesinatos, pero subrayó la importancia de considerar la situación heredada.
