Las pruebas toxicológicas iniciales revelan que el cuerpo de Matthew Perry no mostraba indicios de fentanilo o metanfetamina, desmintiendo así la hipótesis de una sobredosis de estas sustancias como causa de su muerte.
Un reporte policial reciente, obtenido por TMZ, descarta la teoría de que el deceso del reconocido actor estuviera relacionado con un exceso de estas drogas. Sin embargo, este primer análisis no descarta por completo el posible vínculo con el consumo de sustancias, siendo un examen preliminar que requerirá más tiempo para obtener resultados detallados y precisos, probablemente durante semanas o meses.
La investigación se centra ahora en determinar si Perry, conocido por su participación en “Friends”, tenía un historial de abuso de medicamentos recetados. Su cuerpo fue descubierto sin vida a los 54 años en su residencia de Los Ángeles, donde se hallaron fármacos con recetas médicas, todos debidamente etiquetados y almacenados en frascos.
En sus escritos del año 2022, Matthew Perry mencionó haber recibido recetas de opiáceos tras un incidente en su colon, sin embargo, consideró insuficiente la dosis prescrita. Por consiguiente, recurrió a traficantes ilegales para adquirir fentanilo, pagando sumas considerables de dinero de manera regular por estas pastillas.
El dictamen oficial sobre la causa del fallecimiento de Matthew Perry está pendiente, ya que el médico forense del condado de Los Ángeles ha solicitado una investigación más exhaustiva. Esto indica que la autopsia ha finalizado, pero se necesitan más datos antes de emitir un veredicto definitivo. Se espera que transcurran varias semanas antes de que se publique un comunicado oficial al respecto.
Sin embargo, se han confirmado ciertos aspectos en relación al caso. No existen sospechas de actividad delictiva asociada a su muerte, y no se encontraron indicios de drogas ilegales en su domicilio. Se ha confirmado que Matthew Perry falleció en su hogar, y su cuerpo está listo para ser entregado a sus familiares.
