A una hora de la famosa Cancún, la antigua ciudad de pescadores es una gran atracción turística. Lo que hay que saber
Un tranquilo pueblo de pescadores, de unos 1.500 habitantes, de donde partía el ferry que lo conectaba con la isla de Cozumel. Una tranquila localidad del sur de México que cambió radicalmente en los años 80, cuando el turismo masivo llegó para disfrutar, en especial, de sus playas de arenas blancas y un mar azul, de aguas transparentes.
Destino destacado de la Riviera Maya, sobre el mar Caribe, en el estado de Quintana Roo, el antiguo pueblo ahora es una ciudad de 150.000 habitantes, que ofrece un variado abanico de atracciones, además de sus playas.
En los últimos años, escuchamos mucho hablar de Playa del Carmen. Y no es solo por campañas publicitarias, sino porque distintos amigos o conocidos nos hablan de ese paraíso en la tierra. Se ha convertido en uno de los lugares preferidos de los argentinos, históricos amantes de ciudades y playas mexicanas.
Aquí, las nueve cosas a tener en cuenta para viajar a Playa del Carmen:
Playa del Carmen: cuándo viajar
La Riviera Maya tiene un clima cálido y húmedo, con temperaturas que oscilan entre los 17 º C en enero (invierno) y los 33 º C en agosto (verano). La humedad puede llegar al 85%.
Un buen momento para visitarla es diciembre, porque ya no hace tanto calor y pasó la época de huracanes. Otro mes adecuado es octubre, con temperaturas agradables y precios más convenientes que los de diciembre. Además, hay menos turistas.
Playa del Carmen: cómo llegar
No hay vuelos directos a Playa del Carmen, pero sí hasta el aeropuerto más cercano, Cancún, ubicado a 70 km de la ciudad. Aerolíneas Argentinas y Aeroméxico tienen vuelos directos (unas nueve horas). Copa Airlines, en tanto, llega hasta Cancún con escala en Panamá (12 horas de vuelo).
Desde Cancún parten autobuses hacia Playa del Carmen (tardan aproximadamente una hora y cuarto en cumplir el trayecto).
Playa del Carmen: dónde alojarse
Si bien muchos turistas asocian a Playa del Carmen con lujosos resorts de la modalidad all inclusive, la ciudad cuenta con una oferta hotelera bastante variada. Por eso, en primer lugar, hay que elegir entre ese tipo de hoteles o por los ubicados en el centro, más tradicionales.
En pleno centro se destacan el Hotel Deseo y el Hacienda Real del Caribe, además del Yak Hostel. En tanto, el Rosewood Mayakoa; Hacienda Tres Ríos; el Riu Lupita y el Hidden Beach Resort cumplen con los requisitos del primer grupo.
Playa del Carmen: playas imperdibles
El destino preferido de los argentinos que visitan la Riviera Maya no defrauda a quienes buscan playas excepcionales. Manitas, en el centro y de libre acceso, es la preferida de los jóvenes y recibe multitudes. En Playacar, al sur de la ciudad, donde están los principales resorts, también hay sectores abiertos a todos los visitantes.
Otras playas gratuitas: Playa Pública 88, Punta Esmeralda y Xcalacoco, algo más alejadas del centro, pero accesibles en autobús. Ya fuera de la ciudad, Paa-Mul, Xpu Ha, Chemuyil, Playa Paraíso y Playa Maroma invitan a una excusión más extensa por Quintana Roo.
Playa del Carmen: diversión en familia
La Riviera Maya ofrece varios parques temáticos, pero, sin dudas, X Caret es el más famoso. Por eso, vale la pena dedicarle todo un día para disfrutar de su medio centenar de atracciones. Aquí, por ejemplo, se pueden recorrer o nadar por ríos subterráneos que pasan bajo cavernas o flanqueados por vegetación exuberante.
Por supuesto, hay playas y piscinas, con la posibilidad de practicar snorkel o buceo. El Acuario alberga distintas especies marinas, como tortugas y mantarrayas (los más audaces podrán nadar con delfines o sumergirse en una piscina con tiburones).
Otras atracciones: el Aviario, el Mariposario, algunos yacimientos arqueológicos, un llamativo cementerio y la Capilla de Guadalupe, con una Virgen tallada en un tronco de madera. De entre los espectáculos destacamos a los voladores de Papantía, quienes se arrojan hacia el vacío, de espaldas, atados con una cuerda desde un palo giratorio de varios metros de altura. El show México Espectacular es el mejor final para la visita. Más información, en la página web del parque temático.
Playa del Carmen: Isla de Cozumel
A 45 minutos en ferry, la Isla de Cozumel tiene el segundo arrecife más extenso del mundo. Por supuesto, también, una docena de playas, de arenas muy blancas y oleaje suave o fuerte; parques y áreas arqueológicas. Punta Sur, en tanto, es uno de los mejores lugares del mundo para bucear con 40 áreas, que tienen entre 3 y 30 metros de profundidad.
Los sitios arqueológicos San Salvador y El Caracol nos recuerdan el pasado maya de la región. Más información: web de Cozumel.
Playa del Carmen: los cenotes
Reciben este nombre una serie de grutas calcáreas que fueron horadadas por las lluvias o por corrientes submarinas. De esta manera, se convirtieron en reservas de agua, cuya profundidad puede llegar a los 90 m.
Entre los más cercanos a la ciudad se destacan Chaak Tun, compuesto por dos cavernas, una de ellas con techo de estalactitas y de aguas muy frías; Dos Ojos, cuyo nombre proviene de dos reservas de agua, pero que también incluye la siempre oscura Cueva de los Murciélagos; Río Secreto, poblado de estalactitas y estalagmitas y recomendado para recorrer en tour; y Azul, donde hay piscinas naturales y pueden verse cabañas típicas con techo de palma (palapas).
Playa del Carmen: Ruinas mayas, Tulum
Las famosas ruinas de Chichen-Itzá están a unas cuatro horas de viaje desde Playa del Carmen y es una posibilidad para quienes desean ampliar el radio de su visita. Sin embargo, a 65 km, Tulum es una muy buena opción para conocer los vestigios de esta gran civilización prehispánica.
El nombre Tulum significa “muralla” y refiere al recinto fortificado que rodeaba a la ciudad. Habitada desde el siglo VI d.C., su mayor auge se registró entre los siglos XIII y XV. Un edificio de piedra construido sobre el promontorio del acantilado domina la escena y recibe el nombre de El Castillo. Seguramente sirvió de guía para la navegación.
El Palacio, que albergaba a nobles y mandatarios, conserva tallas dedicadas a dioses como Kukulcan, en estilo Puuc, frecuente en la península de Yucatán. El Templo del Dios Descendente, junto a El Castillo, era utilizado para venerar a una deidad bien conocida en la zona, mientras que el Templo de los Frescos, decorado en tonos azul y verde, era otro de los lugares sagrados.
Playa del Carmen: mejores lugares para ir de compras
La Quinta Avenida concentra la actividad comercial de Playa del Carmen. Es una calle peatonal, ubicada muy cerca de la playa, donde los visitantes encontrarán desde grandes tiendas hasta locales que venden textiles mayas, tequila, cacao y artesanías.
También es un excelente lugar para hacer un alto y disfrutar de un café, flanqueado por la sombra refrescante de sus árboles. Por la noche, conviene acercarse a su intersección con la Avenida 12, porque allí hay todo tipo de bares y restaurantes.