En un reciente golpe contra el crimen organizado en Playa del Carmen, Quintana Roo, las autoridades desentrañaron una trama delictiva que involucraba a una empresa de paquetería. Un total de 2.5 kilogramos de sustancias estupefacientes fueron desmantelados por la policía municipal en las instalaciones de la reconocida agencia de envíos Fedex.
El incauto cargamento se ocultaba meticulosamente en un local situado en la calle 12-Bis, estratégicamente ubicado entre las intersecciones de las avenidas 20 y 25, en pleno corazón de la colonia Centro. La droga, ingeniosamente enmascarada dentro de una caja de cartón, fue meticulosamente trasladada por las fuerzas del orden hasta los cuarteles de la Secretaría de Seguridad Pública de Solidaridad.
Este crucial hallazgo marcó el inicio de un proceso riguroso. Las autoridades procedieron con la transferencia de la valiosa evidencia a la Fiscalía General de Quintana Roo, donde se sometió a una minuciosa inspección y se presentó formalmente como parte de un caso de potencial relevancia criminal. Las ruedas de la justicia giraron rápidamente al poner el material bajo la custodia de las instancias apropiadas para el debido proceso jurídico.
Este incidente subraya una tendencia perturbadora en la arena del crimen organizado. Los implicados han adoptado una estrategia recurrente de recurrir a la red de paquetería y mensajería para facilitar sus actividades ilegales. La capacidad de estas empresas para ocultar y transportar clandestinamente mercancía ilícita se ha convertido en un modus operandi habitual para las redes delictivas.