A pesar de haber transcurrido más de un año desde la promulgación de un decreto federal destinado a nacionalizar los terrenos de la colonia Luis Donaldo Colosio en Playa del Carmen, el proceso de regularización de estas parcelas permanece estancado debido a una serie de recursos de amparo interpuestos por la empresa Desarrolladora de la Riviera Maya (Derimaya).
Durante una visita a Tulum, donde supervisó el avance de las obras en la Zona Arqueológica, Román Meyer Falcón, quien lidera la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), explicó que Derimaya ha presentado de manera sucesiva recursos de amparo, lo que ha mantenido el proceso en un limbo legal.
Meyer Falcón comentó: “Estamos en medio de un proceso judicial en contra de Derimaya, con el propósito de que cesen en la presentación de estos recursos de amparo y permitan al gobierno federal llevar a cabo el proceso de regularización”.
El mencionado decreto se promulgó en agosto de 2022 con el objetivo de permitir al gobierno federal otorgar títulos de propiedad para alrededor de cinco mil quinientos lotes a los residentes de esa área. Sin embargo, hasta la fecha, este proceso sigue enredado en cuestiones legales.
Es pertinente destacar que Desarrolladora de la Riviera Maya (Derimaya) fue establecida en 1999 durante la administración de Joaquín Hendricks Díaz, con la finalidad de representar los intereses de personas que alegan ser los propietarios de los terrenos en cuestión. Además, la junta directiva de la empresa incluye la participación del propio gobierno estatal, a través de la Sedatu.
En otro contexto, el titular de la Sedatu mencionó que están colaborando con el programa de desarrollo urbano de Tulum para gestionar la expansión urbana que ha tenido lugar en las últimas cuatro décadas.
“Estamos implementando estrategias para que el municipio y el gobierno estatal puedan ofrecer terrenos de tipo social, a precios mucho más accesibles”, afirmó Meyer Falcón.
Estas viviendas de tipo social están destinadas a los trabajadores de Tulum que, debido a los elevados costos inmobiliarios en la zona, no pueden acceder a una vivienda propia.
