Chetumal, Quintana Roo, 31 de octubre de 2023.- La Comisión Nacional Forestal (Conafor) hace un llamado enfático a la necesidad de que Fonatur, la entidad encargada del Tren Maya, tome acciones decisivas para rehabilitar y recuperar las áreas dañadas por las extensas obras de esta infraestructura ferroviaria. Este llamado se basa en las autorizaciones otorgadas para el cambio de uso de suelo, que exigen la implementación de un plan integral destinado a contrarrestar el impacto ambiental causado.
El delegado de Conafor en Quintana Roo, Javier May Chan, subraya la importancia de que Fonatur desarrolle un plan estratégico que incluya la restauración de las zonas profundamente afectadas por este proyecto de envergadura.
En sus palabras, May Chan advierte que “La mitigación del impacto ambiental originado por la degradación de la selva en Quintana Roo, consecuencia de las construcciones del Tren Maya, es un asunto que debe ser abordado con determinación a través de medidas de reforestación por parte de Fonatur, que ahora opera bajo el nombre de Empresa Tren Maya S.A. de C.V., y está bajo la supervisión de la Secretaría de la Defensa Nacional, responsable de la ejecución de las obras”.
May Chan proporciona detalles al explicar que en las autorizaciones para el cambio de uso de suelo se exige la presentación de un programa integral que contemple una serie de acciones destinadas a minimizar el impacto ambiental en diversos ecosistemas, como, por ejemplo, la implementación de jornadas de reforestación.
Sin embargo, el delegado confiesa su desconocimiento en cuanto al grado de cumplimiento de esta responsabilidad por parte de la entidad federal. Esto se debe a que aún se carece de información precisa sobre la extensión de la selva que ha sido afectada por la construcción del Tren Maya, así como por otras obras que continúan en ejecución en el estado, como el aeropuerto “Felipe Carrillo Puerto” en el municipio homónimo.
De acuerdo con datos proporcionados por grupos ambientalistas que han expresado su oposición al proyecto presidencial, se estima que un total de tres mil 475 hectáreas de selva han sido despejadas para dar paso al Tren Maya y sus correspondientes estaciones en Quintana Roo.