En respuesta a la devastadora tormenta y las inundaciones que azotaron California, el presidente Joe Biden ha tomado medidas decisivas al aprobar una declaración de desastre. Esta acción busca proporcionar asistencia federal vital para respaldar los esfuerzos de recuperación a nivel estatal, tribal y local.
La aprobación presidencial desbloquea fondos cruciales dirigidos específicamente al condado de San Diego. Estos fondos abarcan una amplia gama de ayudas, desde viviendas temporales hasta reparaciones de hogares y préstamos de bajo interés para aquellos con propiedades no aseguradas. Además, se han implementado programas adicionales diseñados para respaldar a individuos y propietarios de negocios durante el difícil proceso de recuperación.
Adicionalmente, se han asignado fondos federales para compartir costos destinados a implementar medidas de mitigación de riesgos en todo el estado. El objetivo es no solo responder a la crisis actual, sino también prevenir futuros desastres y fortalecer la resiliencia de las comunidades afectadas.
La coordinación de estas operaciones de recuperación estará bajo la dirección de Allison Pfaendler de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA). Según un comunicado de la Casa Blanca, se espera que su liderazgo juegue un papel fundamental en la implementación efectiva de recursos y en la prestación oportuna de la ayuda necesaria.
