El carismático Elon Musk, fundador de Neuralink, ha dejado una marca imborrable en la historia al anunciar el hito histórico del implante exitoso del primer chip cerebral en un ser humano, el pasado domingo 28 de enero de 2024. Musk reveló con entusiasmo que el receptor del implante está experimentando una recuperación sin contratiempos.
La Autorización de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) el año pasado permitió a Neuralink llevar a cabo su pionero ensayo clínico, marcando un paso monumental en la evaluación de la eficacia de este revolucionario implante cerebral en seres humanos.
En una publicación cautivadora en su plataforma social, X, Musk compartió los resultados iniciales que muestran una detección prometedora de picos neuronales. Este logro no solo simboliza un avance hacia interfaces que permiten a las personas con tetraplejia controlar dispositivos mediante el pensamiento, según lo detallado en el sitio web oficial de Neuralink, sino que también representa un salto significativo en la vanguardia de la neurotecnología.
Sin embargo, es esencial señalar que a principios de este mes, Reuters informó que Neuralink enfrentó sanciones económicas por violar las regulaciones del Departamento de Transporte de Estados Unidos relacionadas con el transporte de materiales peligrosos. Este episodio plantea interrogantes sobre la empresa, destacando la importancia de abordar las cuestiones éticas y regulatorias a medida que se exploran los límites de la innovación en el campo de la neurociencia.
