En el Día en Memoria de las Víctimas del Holocausto, el líder del gobierno alemán, Olaf Scholz, ha reiterado con contundencia el compromiso de “Nunca más”, elogiando la movilización de sus compatriotas en contra de la ultraderecha.
Scholz, perteneciente al partido socialdemócrata, expresó en un pódcast transmitido el sábado que la responsabilidad por el crimen contra la humanidad, perpetrado por alemanes, sigue siendo una carga que deben enfrentar. Al mismo tiempo, celebró ver a Alemania unida, con millones de ciudadanos participando en manifestaciones en todo el país.
Durante las últimas dos semanas, una multitud de alemanes se ha congregado para protestar contra las tendencias radicales del partido Alternativa para Alemania (AfD).
Este fin de semana, más de 300 marchas están programadas, según la alianza ciudadana Campact, una de las fuerzas impulsoras del movimiento. Campact informó el sábado que hay tres veces más manifestaciones que la semana anterior, especialmente en el este de Alemania, donde AfD tiene un fuerte respaldo electoral.
La conmemoración anual del Día Internacional en Memoria de las Víctimas del Holocausto en Alemania coincide con el aniversario de la liberación del campo de exterminio de Auschwitz-Birkenau por las fuerzas soviéticas el 27 de enero de 1945.
Este año, el 79º aniversario se celebra en un contexto tenso tras las revelaciones de Correctiv, un medio de investigación alemán, el 10 de enero, que miembros de AfD discutieron la expulsión masiva de migrantes y “ciudadanos no asimilados” en una reunión en noviembre. La ministra del Interior, Nancy Faeser, equiparó la reunión con la “horrible conferencia de Wannsee” de 1942, donde el régimen nazi planificó el exterminio de los judíos europeos.
Scholz concluyó subrayando que el lema “Nunca más” exige una vigilancia constante y recordó que la democracia no es un regalo divino, sino una construcción humana que debe ser preservada.