El lanzamiento de misiles por parte de China durante los ejercicios militares fuera de Taiwán fue una escalada innecesaria, según el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, quien agregó que Beijing disciplinará a la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, por visitar la isla.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de China dijo que pospondrá las conversaciones entre los jefes militares de Estados Unidos y China y detendrá las discusiones bilaterales sobre el clima y la seguridad marina, lo que deteriorará aún más las relaciones diplomáticas el viernes.
Blinken dijo que Washington le ha dejado muy claro a Beijing que no desea una crisis, ya que las tensiones diplomáticas aumentaron esta semana por el viaje de Pelosi a la isla autónoma que Beijing considera su territorio soberano.
“No hay justificación para esta reacción militar severa, desproporcionada y en aumento”, dijo Blinken durante una conferencia de prensa realizada en Camboya en conjunto con el Foro Regional de la ASEAN. Él dijo: “Ahora, han elevado el comportamiento de riesgo a un nivel completamente nuevo”.
China comenzó sus ejercicios militares más grandes en las aguas y cielos que rodean a Taiwán el jueves, un día después de que Pelosi enfureciera a Beijing al convertirse en el visitante estadounidense de más alto nivel en Taiwán en el último cuarto de siglo. El domingo al mediodía, se espera que se reanuden los ejercicios con fuego real.
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El ejército de China realizó maniobras aéreas y marítimas hacia el norte, suroeste y este de Taiwán el viernes “para probar las capacidades de combate combinadas de las fuerzas”, según un comunicado publicado en el Weibo oficial del Comando de Teatro del Este del Ejército Popular de Liberación (EPL).
Blinken enfatizó que Estados Unidos no iniciaría una crisis, sino que continuaría ayudando a los aliados regionales y realizando tránsito aéreo y marítimo de rutina a través del Estrecho de Taiwán.
Él dijo: “Volaremos, navegaremos y operaremos en cualquier lugar que lo permita la ley internacional”.
Según el Washington Post, la Casa Blanca convocó el jueves al embajador chino Qin Gang para criticar la intensificación de las actividades contra Taiwán.
Los representantes del Departamento de Estado no respondieron de inmediato a una solicitud de comentarios sobre la suspensión de las negociaciones por parte de China o la noticia de que Estados Unidos convocó al embajador de Beijing.
En reacción a la conducta “vicioso” y “provocadora” de Pelosi, el Ministerio de Relaciones Exteriores de China declaró el viernes que se impondrán sanciones a ella y su familia inmediata. leer más
“A pesar de las graves preocupaciones y la firme oposición de China, Pelosi insistió en visitar Taiwán, interfiriendo gravemente en los asuntos internos de China, socavando la soberanía y la integridad territorial de China, pisoteando la política de una sola China y poniendo en peligro la paz y la estabilidad del Estrecho de Taiwán”. dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores en un comunicado.
El Ministerio de Relaciones Exteriores también dijo que estaba deteniendo la cooperación en la prevención del crimen transfronterizo, los esfuerzos antidrogas y la repatriación de inmigrantes ilegales.
Pelosi dijo en Japón que el propósito de su viaje a Asia nunca fue alterar el statu quo regional.
“EL MAL VECINO”
Alrededor de diez barcos navales chinos y veinte aviones militares cruzaron temporalmente la línea media del Estrecho de Taiwán el viernes por la mañana, dijo una fuente taiwanesa a Reuters.
Anteriormente, el Ministerio de Defensa Nacional de Taiwán dijo que el ejército de la isla envió aviones y barcos y desplegó sistemas de misiles terrestres para monitorear la situación allí.
Durante los simulacros con fuego real del jueves, China lanzó numerosos misiles a los mares alrededor de Taiwán en una escalada sin precedentes.
El Ministerio de Defensa japonés, que está monitoreando los simulacros, afirmó primero que hasta cuatro misiles habían volado sobre la capital de Taiwán. También afirmó que cinco de los nueve misiles lanzados en su territorio cayeron dentro de su zona económica exclusiva (ZEE), lo que llevó a Tokio a quejarse diplomáticamente.
Más tarde, el Ministerio de Defensa de Taiwán dijo que los misiles estaban en lo alto de la atmósfera y no representaban ningún peligro. No reveló los detalles de sus trayectorias de vuelo debido a consideraciones de inteligencia.
Algunos ciudadanos de Taipei, incluido el alcalde Ko Wen-je, criticaron al gobierno por no emitir una advertencia de misiles, aunque un experto en seguridad dijo que el gobierno podría haberlo hecho para evitar incitar al miedo y hacerle el juego a China.
El analista Mei Fu-shin de los Estados Unidos dijo: “Contrarrestó la guerra psicológica del Partido Comunista Chino”. El nivel de conmoción y pánico fue menor de lo que podría haber sido.
El primer ministro Su Tseng-chang de Taiwán se negó a comentar directamente sobre los misiles, pero se refirió a China como el “vecino malvado que hace alarde de su fuerza en nuestra puerta”.
Bonnie Glaser, experta en seguridad de Asia del German Marshall Fund de los Estados Unidos en Washington, declaró: “En mi opinión, la mayor preocupación es que China está practicando un bloqueo al demostrar que puede bloquear los puertos y aeropuertos de Taiwán y detener los envíos”.
LAS PREOCUPACIONES DE JAPÓN
El presidente Tsai Ing-wen dijo en respuesta a la mili china ejercicios militares que Taiwán no provocaría una confrontación sino que defendería su soberanía y seguridad nacional con vigor.
Desde 1949, cuando los comunistas de Mao Zedong tomaron el control de Beijing después de derrotar a los nacionalistas de Chiang Kai-Kuomintang shek (KMT) y obligar al gobierno liderado por el KMT a evacuar Taiwán, Taiwán ha tenido autogobierno.
Beijing ha dicho que las relaciones con Taiwán son una preocupación interna. Afirma que conserva el derecho de subyugar a Taiwán por la fuerza si es necesario.
Pelosi se refirió al alboroto diplomático provocado por la gira de una semana de duración de la delegación del Congreso a Asia, particularmente a Taiwán, en Tokio.
Ella dijo durante una conferencia de prensa después de una reunión con el primer ministro japonés Fumio Kishida: “Hemos declarado desde el principio que nuestra presencia en Taiwán y el área no pretende alterar el statu quo”.
Kishida dijo: “He advertido a la presidenta Pelosi que los misiles balísticos de China que aterrizan en los mares japoneses, incluida la ZEE, amenazan nuestra seguridad y protección nacional, y que Japón condena firmemente tales actos”.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de China dijo el jueves que convocó a los embajadores de Japón y Canadá a Beijing en respuesta a una declaración “incorrecta” del Grupo de los Siete (G7) sobre Taiwán, y también presentó objeciones a los enviados de la UE.
