El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), expresó su deseo de concluir su administración sin recurrir a la represión, sin masacres y sin desapariciones. Esta declaración ha generado controversia, ya que muchos consideran que la violencia diaria en el país es innegable.
AMLO enfatizó que no se trata solo de un deseo personal, sino que está convencido de que es posible erradicar las masacres y la violencia.
“Quiero, y estoy seguro de que lo lograremos, porque hemos superado tiempos y circunstancias difíciles sin caer en provocaciones. Quiero concluir mi mandato sin actos de represión, sin masacres, sin desaparecidos, con paz y tranquilidad, pero sin autoritarismo”, afirmó el mandatario el miércoles.
Añadió que el pueblo entiende su postura, a diferencia de la élite.
“La élite busca resolver los problemas mediante el uso de la fuerza, con cárceles, amenazas y leyes más estrictas. Esa es su mentalidad; los conservadores siempre piensan así. Nosotros pensamos como el pueblo”, explicó AMLO desde Palacio Nacional.
Las declaraciones del presidente han sido cuestionadas por numerosos ciudadanos y activistas, quienes sostienen que parecen ignorar la violencia cotidiana que ha dejado miles de muertos y desaparecidos.
Critican que AMLO parece desentenderse de estas víctimas y crea una narrativa diferente, la de un país que solo existe en su mente y en sus “otros datos”.