En un desarrollo intrigante en la saga que envuelve al director de equipo de Red Bull, Christian Horner, ha surgido información sobre posibles medidas disciplinarias que podrían tomar contra Helmut Marko como resultado de una investigación en curso.
La reciente suspensión de la empleada que formuló acusaciones contra Horner como resultado de una investigación ha puesto ahora a Marko bajo el escrutinio de la empresa.
Marko está siendo investigado en relación con varias filtraciones a los medios de comunicación desde que comenzó la investigación sobre Horner en la empresa de bebidas energéticas Red Bull.
Aunque la investigación aún está en marcha y no se ha llegado a ninguna conclusión sobre si Marko violó el protocolo del equipo, existe la posibilidad de que se enfrente a sanciones disciplinarias si se demuestra que filtró información confidencial.
Marko ha insinuado la posibilidad de ausentarse de la próxima carrera en Australia en vista de estas circunstancias.
Cuando se le preguntó sobre la posibilidad de ser suspendido a partir del próximo lunes, Marko expresó que tomaría su decisión considerando la complejidad del asunto y la necesidad de mantener la armonía en el equipo.
Red Bull está llevando a cabo una investigación exhaustiva sobre las filtraciones, y su socio de motores, Honda, también está buscando respuestas sobre la situación.
La prioridad principal es regresar al enfoque en lo deportivo, y hasta el momento, el equipo ha mantenido un buen rendimiento en este aspecto.
La situación de Marko cobra especial relevancia debido a las especulaciones recientes sobre cómo su continuidad en el equipo podría afectar el futuro de Max Verstappen, con rumores que sugieren una posible cláusula en el contrato de Verstappen que le permitiría irse si Marko deja su cargo.
Red Bull se ha negado a hacer comentarios sobre este asunto cuando fue contactado por Motorsport.com.