El presidente Andrés Manuel López Obrador ha aclarado su posición con respecto a las elecciones presidenciales en Argentina, negando rotundamente su apoyo al candidato Sergio Massa y exponiendo su discrepancia con la mentalidad conservadora.
En una conferencia matutina celebrada en Palacio Nacional, López Obrador enfatizó que no respaldó a Sergio Massa, desmintiendo con firmeza las afirmaciones que sugerían lo contrario realizadas por algunas fuentes periodísticas.
El mandatario expresó su rechazo hacia el pensamiento conservador, señalando específicamente al ganador de las elecciones en Argentina, Javier Milei, como ejemplo de esta corriente de pensamiento.
De manera contundente, López Obrador declaró: “No he brindado respaldo a ningún candidato. Mi desacuerdo radica en las ideas conservadoras y reaccionarias, independientemente del país donde se manifiesten”.
Asimismo, resaltó su oposición a políticas privatizadoras, al autoritarismo y a la exclusión de acceso a la educación y la salud mediante pagos privados. Hizo hincapié en que considera la educación y la salud como derechos fundamentales para todas las personas, no como privilegios exclusivos.
En su discurso, el presidente reiteró su desacuerdo con las políticas que considera clasistas, autoritarias y corruptas, subrayando que quienes las promueven son, en su opinión, los individuos más corruptos y ladrones dentro de la oligarquía dominante a nivel global.
Aunque previamente había indicado que no rompería relaciones con Argentina, López Obrador manifestó ahora su falta de interés en entablar diálogo con los defensores de ideologías como la de Milei.
El presidente expresó su disposición a relacionarse con sectores de derecha, siempre y cuando no estén directamente asociados con las políticas que él critica.
Estos comentarios surgieron como respuesta a informes en la prensa que sugerían el apoyo de López Obrador a Massa, incluyendo afirmaciones de algunos columnistas sobre la presunta asesoría y financiamiento proporcionados por el Gobierno mexicano.
Además, López Obrador también opinó sobre el triunfo del candidato de ultraderecha, Javier Milei, en las elecciones presidenciales argentinas, señalando que considera que este resultado podría haber perjudicado a los argentinos.
Milei, a quien López Obrador ha catalogado como un “facho conservador”, obtuvo una contundente victoria en los comicios, mientras que Sergio Massa, representante del peronismo, recibió menos apoyo popular.
La elección de Milei tuvo lugar en un contexto de alta inflación, elevados índices de pobreza y una marcada brecha cambiaria en Argentina.