Los 11 miembros que componen el consejo de administración actual reciben una compensación de casi 3 millones de dólares, según documentos de la SEC. Si Elon Musk se hace con la compañía, ese dinero permanecerá en las cuentas de Twitter.
Elon Musk no se rinde en su intención de adquirir la totalidad de Twitter, pese a que la junta directiva de la compañía intenta pararle los pies con la estrategia de la píldora envenenada. El magnate se muestra optimista y no ha dudado en comentar algunos de sus futuros planes si finalmente la compra se lleva a cabo, como el de ahorrar 3 millones de dólares al año al disolver el consejo de administración compuesto, actualmente, por 11 miembros.
El CEO de Tesla y SpaceX ha revelado su intención de ahorrarse esa cantidad como respuesta a una publicación en la que se incluía un fragmento de un documento de la SEC, el cual refleja que los miembros de la junta de Twitter reciben, en conjunto, 2,9 millones de dólares anuales en compensaciones tanto en efectivo como en acciones. “El salario de la junta será de 0 dólares si mi oferta tiene éxito, por lo que eso es ~ 3 millones de dólares al año ahorrados”, ha comentado a Elon Musk.
En el tweet, Musk sugiere que prescindirá del consejo de administración si finalmente la compra se lleva a cabo, dado que su objetivo es adquirir el 100 % de la compañía y, por lo tanto, él será el único accionista de la misma.
Días atrás, el magnate también publicó un tweet en el que mencionaba que los intereses económicos de los miembros de la junta directiva “simplemente no están alineados con los accionistas”. Principalmente, porque los miembros, colectivamente, apenas poseen acciones de la empresa.
Twitter activa un plan para evitar la compra por parte de Elon Musk
Twitter, mientras tanto, tiene un plan para evitar que el CEO de Tesla y SpaceX termine adquiriendo el totalidad de la red social por 43.000 millones de dólares. La compañía, en concreto, ha confirmado que activará el mecanismo de la “píldora envenenada” si Elon Musk —o cualquier otro inversor— compra más del 15% de las acciones de la empresa sin aprobación previa. Esta estrategia consta de dos métodos que tienen el mismo cometido: hacer que Elon Musk de marcha atrás en su intención de realizar una OPA hostil.
Uno de los métodos es permitir que los accionistas de Twitter, a excepción del que tiene intención de realizar la compra hostil (Elon Musk), puedan adquirir acciones a un precio menor del actual para después venderlas a un mayor coste y diluir, por lo tanto, la participación del empresario. Esto también hará que Musk deba comprar acciones a un mayor precio del previsto si quiere continuar con sus planes de comprar el 100% de la compañía.
El otro método, que se llevaría a cabo si finalmente se aprueba la OPA Hostil, es rebajar el precio de las acciones del magnate a aquellos inversores que han mantenido sus acciones. De este modo, podrán adquirirlas a un menor coste del habitual y venderlas a un mayor precio. Es algo que también haría disminuir la participación de Elon Musk.