Chetumal. Luego de pernoctar en el municipio de Bacalar, el presidente Andrés Manuel López Obrador emprendió una jornada de supervisión para constatar el progreso de importantes proyectos federales en Quintana Roo. Entre los enfoques principales se encuentran el seguimiento de avances en el Tren Maya y una revisión detallada del estado actual del Aeropuerto Internacional de Tulum.
En las primeras horas de la mañana, López Obrador llevó a cabo un recorrido aéreo sobre los tramos 5 y 6, que abarcan el tramo que va desde Cancún hasta el Kilómetro 19. Los informes previos destacaron avances notables en estas secciones, reafirmando la confianza en que el Tren Maya pueda comenzar a operar en el próximo diciembre.
En relación al aeropuerto conocido como “Felipe Carrillo Puerto”, se ha confirmado que la pista de aterrizaje está en una etapa prácticamente finalizada, y las infraestructuras muestran un progreso constructivo que supera el 53%. Sin embargo, durante el día se proporcionará una actualización detallada sobre su estado actual.
Posteriormente al mediodía, el mandatario se trasladó a Cancún con el propósito de evaluar en persona la condición del Boulevard Luis Donaldo Colosio Murrieta, además de realizar una supervisión exhaustiva del proceso de dragado que se está llevando a cabo en la Laguna Nichupté.
Este esfuerzo de supervisión no será único, ya que se ha programado que el presidente regrese para inspeccionar nuevamente el progreso de las obras durante el próximo mes de septiembre. Esta práctica, establecida desde el inicio de los proyectos, se repite de manera consistente cada 15 días.
A lo largo de estas evaluaciones, Andrés Manuel López Obrador estuvo acompañado por representantes destacados del Fondo Nacional de Turismo (Fonatur), así como autoridades de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Secretaría de Marina (Semar), y el Instituto Nacional para la Administración y Avalúo de Bienes Inmuebles (Indaabin), entre otros organismos relevantes que participan en estos proyectos de envergadura.
