En una impactante situación, el camillero Víctor F., quien trabaja en el hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), se encuentra esposado a una camilla mientras clama por la responsabilidad de aquellos verdaderos culpables en la muerte de una niña de 6 años. La pequeña perdió la vida trágicamente al quedar atrapada en un elevador, y Víctor, quien también quedó atrapado en esa misma situación, desea que los verdaderos responsables sean señalados y enfrenten las consecuencias.
En un video ampliamente difundido, se puede observar a Víctor rodeado por sus seres queridos y compañeros de trabajo, quienes le brindan su solidaridad en medio de esta situación tan desgarradora.
Con una bata de paciente y esposado a la camilla, el camillero narra cómo logró liberarse del elevador y, desesperadamente, intentó rescatar a la niña.
“No puedo aceptar la culpa por algo que no fue mi responsabilidad. Yo también fui víctima de esta tragedia. Quedé atrapado en ese elevador y tuve que salir por un pequeño agujero. Incluso intenté rescatar a la niña. Lo hice porque, al fin y al cabo, la mayoría de nosotros somos padres, y la pequeña tenía la misma edad que mi hijo menor”, declaró con profunda emotividad.
Víctor enfatizó que los verdaderos responsables deben asumir las consecuencias de sus actos, un sentimiento que fue respaldado por sus colegas de trabajo.
“No es justo. No me importa que sigan mancillando mi nombre. Lo que realmente importa es que los responsables rindan cuentas por lo que han hecho. Sabemos quiénes son, y aquellos que no cumplen con sus deberes deben enfrentar las consecuencias adecuadas”, agregó con determinación.
En otro video, el doctor Enrique Leobardo Ureña, jefe del Departamento de Organización y Administración de los Servicios de Salud del IMSS, informó que aproximadamente a las 13:10 horas se realizó un reporte al encargado del mantenimiento de Citramed Transportación Vertical en México S.A de C.V.
Como resultado, horas más tarde, un técnico designado por la empresa acudió a inspeccionar el elevador. Sin embargo, antes de partir, el técnico no colocó ninguna señal de precaución para advertir sobre posibles fallas, y lamentablemente el elevador no fue puesto fuera de servicio.