El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, inició una nueva gira de trabajo en Quintana Roo para supervisar los trabajos del Tren Maya. Sin embargo, su visita no estuvo exenta de controversias. Un grupo de ejidatarios de Laguna Om se acercó al mandatario para expresar su descontento por el cambio de ubicación del paradero del tren, el cual habría sido trasladado del centro poblacional a un terreno que, según ellos, pertenece a José Carlos Azcárraga.
Por otro lado, un grupo del Sindicato Único de Trabajadores del Gobierno del Estado (Sutage) solicitó la intervención del presidente para permitir una elección legítima para renovar al secretario general del sindicato, ya que el proceso anterior fue considerado ilegítimo por las autoridades laborales.
López Obrador escuchó ambas demandas y luego abordó la camioneta que lo llevaría al aeropuerto. Esta es la cuarta vez que el presidente pernocta en Chetumal para supervisar los trabajos del Tren Maya en los tramos 5 y 6 que pasan por Quintana Roo.
